Ruperto de wittelsbach. Nació el 18 de mayo de 1869 en Munich, Alemania. Hijo del Rey Luis III de Baviera y de la Archiduquesa María Teresa de Austria-Este. Durante su adolescencia desarrolló un profundo interés por los deportes. Se convirtió en el primer miembro de la Casa Real de Baviera en estudiar en una escuela pública, el Maximilian-Gymnasium de Munich. Además de sus estudios dedicaba tiempo a la equitación y el baile. Su educación incluía aprender un oficio, eligiendo la carpintería. Luego de graduarse en la escuela secundaria, entró en la Baviera Infanterie-Leibregement como Segundo Teniente. Entre 1889 y 1891 estudió en las universidades de Munich y Berlín. En el ejército alcanzó el rango de Coronel y se convirtió en el Comandante del Regimiento de Infantería segundo Kronprinz. El 10 de julio de 1900 en Munich, Baviera, el Príncipe Ruperto se casó con su prima la Duquesa María Gabriela de Baviera, hija del Duque Carlos Teodoro de Baviera y de la Princesa María José de Braganza. De dicho matrimonio nacieron 4 hijos: el Príncipe Leopoldo de Baviera; la Princesa María Teresa de Baviera; el Duque Alberto de Baviera; el Príncipe Ruperto de Baviera (30 mayo 1909 a 26 junio 1912). La Duquesa de Baviera murió de una insuficiencia renal en 1912 a la edad de 34 años. El 07 de abril de 1921 en Lenggries, Ruperto se casó con la Princesa Antonia de Luxemburgo, hija del Gran Duque Guillermo IV de Luxemburgo y de la Infanta María Ana de Portugal. De dicho matrimonio nacieron 7 hijos: el Príncipe Enrique de Baviera, casado con Ana María de Lustrac; la Princesa Irmingard de Baviera, casada con el Príncipe Luis de Baviera; la Princesa María Gabriela de Baviera, casada con Tommaso Brunetti y con Gustavo Schimert; la Princesa Hilda de Baviera, casada con Juan Bradstock Lockett de Loayza Edgar; la Princesa Gabriela de Baviera, casada con el Duque Carlos de Croy; y la Princesa María Teresa de Baviera, casada con el Príncipe Jean Engelbert, Duque de Arenberg. En 1900 el Príncipe Ruperto fue nombrado Caballero de la Orden del Toisón de Oro en Austria. En 1906, Ruperto se convirtió en Comandante de la I Cuerpo de Ejército bávaro, con el rango de Teniente General de la infantería, promovido a General en 1913. El 05 de noviembre de 1913, su padre fue nombrado Rey por el voto del Senado de Baviera, convirtiéndose en el Rey Luis III de Baviera. Este hecho convirtió a Ruperto en Príncipe Heredero de Baviera. Durante la I Guerra Mundial, el Príncipe estuvo a cargo de varios batallones, logrando demostrar que era un gran estratega. Ruperto ha sido considerado por algunos como uno de los mejores Comandantes del Ejército Imperial alemán de la Primera Guerra Mundial. Finalmente renunció a su mando el 11 de noviembre de 1918. Ese mismo año, se había comprometido con la Princesa Antonieta de Luxemburgo, pero la derrota alemana hizo imposible el matrimonio y el compromiso se canceló momentáneamente. Ruperto perdió su oportunidad de gobernar Baviera cuando se convirtió en una república tras las revoluciones que siguieron a la guerra. Escapó a Tirol por miedo a las represalias del régimen comunista bávaro, regresando en septiembre de 1919. Finalmente la situación política cambió lo que le permitió casarse con la Princesa de Luxemburgo en 1921. Se opuso a la República de Weimar y nunca renunció a sus derechos al trono, mostrando como alternativa una monarquía constitucional en Baviera. Tras la muerte de su padre en octubre de 1921, Ruperto declaró su derecho al trono, convirtiéndose en el Jefe de la Casa de los Wittelsbach. Formó el Ausgleichfond Wittelsbacher en 1923, un acuerdo con el estado de Baviera dejando los más importantes palacios, tales como Neuschwanstein y Linderhof, al pueblo bávaro. El nunca fue tentado a unirse a la extrema derecha alemana, pese a los intentos de Hitler para ganárselo a través de las promesas de la restauración como Rey. El Príncipe de la Corona se vio obligado a exiliarse en Italia en diciembre de 1939, donde permaneció como invitado del Rey Víctor Manuel de Italia. A él y a su familia se les prohibió regresar a Alemania. En octubre de 1944, cuando Alemania ocupó Hungría, la esposa de Ruperto y sus niños fueron capturados y encarcelados en el campo de concentración de Sachsenhausen en Oranienburg, Brandeburgo. En abril de 1945 fueron trasladados al campo de concentración de Dachau, donde fueron liberados por el Ejército de los Estados Unidos. La Princesa Antonieta nunca se recuperó totalmente del cautiverio, muriendo pocos años después en Suiza. Fue sepultada en Roma, pero fue su corazón, cumpliendo con la tradición Wittelsbach, se encuentra en la Capilla de la Milagrosa Imagen, en Altötting. Luego de la Segunda Guerra Mundial, regresó a Baviera, donde contaba con un apoyo de entre el 60 y 70% de la población para la reinstauración de la Monarquía. Sin embargo el país estaba opacado por los norteamericanos, los cuales impidieron el regreso a la Monarquía. El Príncipe Ruperto de Baviera murió el 02 de agosto de 1955 en el castillo Leutstetten a la edad 86 años. Recibió un funeral de estado, siendo sepultado en la cripta de la Theatinerkirche en Munich, cerca de su abuelo el Príncipe Leopoldo y el Rey Maximiliano I Baviera.
domingo, 27 de junio de 2010
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