Dinastía de los Romanov-Holstein-Gottorp. San Petersburgo, Rusia. 03 de junio de 2010. En la catedral de la Fortaleza de San Pedro y San Pablo de la ciudad de los Zares, se llevó a cabo el funeral de Su Alteza Imperial, la Gran Duquesa Leonida Georgevna de Rusia. El féretro con el cuerpo de la viuda del Gran Príncipe Vladimir Kirillovich Romanov fue colocado en la tumba de los Grandes Príncipes, junto a los restos de su esposo, según su última voluntad. Leonida fue el último miembro de la Casa Imperial de Rusia en nacer durante el reinado del Emperador Nicolás II Alexandrovich. La ceremonia fue modesta, muy distinta a las llevadas a cabo para los miembros de la familia imperial durante la era imperial. En el día de ayer, el féretro fue expuesto en la catedral a fin de que pudiera ser despedido por los ciudadanos rusos. A su lado se encontraban su hija, la Gran Duquesa y Jefa de la Casa Imperial, María Vladimirovna de Rusia y su nieto, el Tsarevich y Gran Duque Gueorgui Mihailovich. Leonida fue el primero de la Dinastía de los Romanov que regresó a Rusia tras la Revolución. Jugó un gran papel en la unificación de la Iglesia Ortodoxa Rusa, manteniendo correspondencia con el Patriarca Alexis II. Su principal función con el pueblo ruso fue participar en organizaciones de caridad y culturales. Nacido como Princesa Bagration, en 1948 se casó con el Gran Príncipe Vladimir Kirillovich, bisnieto del Emperador Alejandro II Nicolaevich. Su morada final es la bóveda del Gran Ducado, construido a principios del siglo XX, para sepultar a todos los miembros de la familia imperial sin corona. Si bien el lugar tiene capacidad para 60 féretros, sólo 17 Grandes Duques fueron sepultados allí durante el siglo pasado. Según la tradición el ataud fue cubierto con la bandera imperial y,María y Gueorgui arrojaron un puñado de tierra en la tumba de la Gran Duquesa Leonida Georgevna de Rusia.
jueves, 3 de junio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario