ANA I DE INGLATERRA.

Ana Estuardo. Nació el 06 de febrero de 1665 en el Palacio de St. James, Londres, Inglaterra. Hija de Jacobo, Duque de Cork, futuro Rey Jacobo II de Inglaterra y de Ana Hyde. Ana y María fueron los únicos hijos de la pareja en llegar a la adultez. Durante su infancia, la Princesa sufrió una infección ocular y fue enviada a Francia para ser tratada, regresado a Inglaterra en 1670. Alrededor del año 1672, la conversión de su padre al catolicismo romano se hizo pública. Sin embargo, de acuerdo a las órdenes del Rey Carlos II, Ana y su hermana María fueron educadas bajo la fe protestante. El 28 de julio de 1683, en el Palacio de St. James la Princesa Ana se casó con el Príncipe protestante Jorge de Dinamarca, hermano del Rey Cristian V. De dicho matrimonio nacieron 18 hijos, sin embargo ninguno de ellos llegaría a la adultez. Cuando el Rey Carlos II murió en 1685, el padre de Ana ascendió el trono como Jacobo II. El Rey tuvo un hijo con su segunda esposa María de Módena, Jacobo Francisco, que nació el 20 de julio de 1688. La hermana y el cuñado de la Princesa Ana, María y Guillermo, ayudados por el temor de los ingleses en la continuidad de una Dinastía católica, invadieron Inglaterra para destronar al impopular y despótico Jacobo II. En 1689, una Convención Parlamentaria declaró que Jacobo había abdicado al trono cuando trató de huir, y que el trono estaba vacante. La corona fue ofrecida, e inmediatamente aceptada, a Guillermo y María, que gobernaron como Monarcas en conjunto. El Acta de Derechos estableció la sucesión al trono. La Princesa Ana y sus descendientes estarían en la línea de sucesión tras los posibles hijos de Guillermo y María. Luego de ellos tendrían derecho cualquier descendiente de Guillermo en un posible segundo matrimonio. Cuando María II murió de viruela en 1694, Guillermo III continuó reinando en solitario. En el año 1700, la futura Reina sufrió un duro golpe, su único hijo que había sobrevivido a la niñez, Guillermo, murió a los 11 años de edad. Este hecho generó una crisis sucesoria. Guillermo y María no habían tenido hijos así, la Princesa Ana, presunta Heredera del trono, era la única que quedaba en la línea de sucesión establecida por el Acta de Derechos. Si la línea de sucesión quedara extinguida totalmente, resultaría fácil el regreso del depuesto Rey Jacobo II al trono inglés. Para impedirlo, el Parlamento decretó el Acta de Establecimiento en 1701, el cual estipulaba que, a falta de descendientes de la Princesa Ana o de Guillermo III, la corona pasaría a Sofía, Electora de Hannover, y a sus descendientes, por ser la más cercana pariente protestante. Ese mismo año, muere el Rey Jacobo II. Guillermo III murió el 08 de marzo de 1702, siendo entonces sucedido por Ana, quien fue coronada el 23 de abril de 1702 en la Abadía de Westminster. En ese período comenzó la guerra de sucesión española, entre Felipe de Borbón y Carlos de Habsburgo. Inglaterra apoyó las pretensiones del Archiduque debido a que Francia había reconocido como Rey de Inglaterra a Jacobo III, hijo de Jacobo II, tras su muerte. Este conflicto continuaría hasta los últimos años del reinado de Ana I Estuardo, y dominaría la política extranjera y nacional. Otro tema principal del gobierno de Ana, fueron las tentativas de convertir a Inglaterra y Escocia en un solo Reino. Bajo la presión de Inglaterra, Escocia firma el tratado de Unión el 16 de enero de 1707. De acuerdo al Acta, Inglaterra y Escocia se convirtieron en un solo Reino llamado Gran Bretaña. El marido de Ana, el Príncipe Jorge de Dinamarca, murió el 28 de octubre de 1708. El nuevo gobierno comenzó a buscar la paz en la Guerra de Sucesión Española, porque la victoria de Austria sería tan perjudicial para los intereses británicos como si ganara Francia. Bajo los términos del tratado de Utrecht, Felipe, nieto del Rey francés Luís XIV, permaneció como Rey de España. Gran Bretaña obtuvo los territorios españoles de Gibraltar y Menorca. Varias colonias francesas en Norteamérica fueron también cedidas a Gran Bretaña. Así terminaba la intervención inglesa en la Guerra de Sucesión Española. Ana cayó enferma víctima de un ataque de gota, complicándose su salud por una infección que le produjeron las erisipelas que padecía. Estas enfermedades le causaron un absceso y fiebre, falleciendo en el Palacio de Kensington, el 01 de agosto de 1714, a los 49 años de edad. Su cuerpo estaba tan hinchado que cuando fue enterrado en la Abadía de Westminster se tuvo que utilizar un ataúd dos veces más ancho de lo normal.