María Pavlovna Romanova. Nació el 18 de abril de 1890 en San Petersburgo, Rusia. Hija del Gran Príncipe Pablo Alexandrovich de Rusia y de la Princesa Alexandra de Grecia. Su madre murió poco después de haber dado a luz a su hermano, Dimitri Pavlovich, cuando María tenía menos de dos años de edad. Como su padre quedó muy afectado por la muerte de su esposa, los niños fueron atendidos por sus tíos, el Gran Príncipe Sergio y la Gran Princesa Isabel Feodorovna. Hasta los seis años, María no hablaba ni una palabra en ruso, ya que todas sus institutrices hablaban inglés. Posteriormente otra institutriz le enseñó francés y permaneciendo con ella hasta su matrimonio. En 1902 su padre se casó con Olga Valerianovna Paley. Como el matrimonio no fue aprobado por el Emperador Nicolás II, debió exiliarse. María y Dmitri estaban molestos por la pérdida de su padre y escribieron a la Emperatriz viuda María Feodorovna una carta pidiéndole que convenciera a Nicolás de revertir su decisión. Ambos niños fueron colocados bajo la custodia de Sergio e Isabel. María tuvo una relación algo tensa con su tía, que era la única madre que había conocido realmente. Según ella, su tía era un poco fría con ella durante su infancia. En 1905 su tío fue asesinado por una bomba durante la Revolución de 1905. Su atacante se había abstenido de un ataque previo, porque junto con el Gran Príncipe estaba su esposa y sobrinos, y éste no quería lastimarlos. En un segundo intento, días más tarde, consiguió su objetivo. El Zar trasladó la tutoría a Isabel y le dio permiso a Pablo para visitar Rusia esporádicamente. Un año más tarde María estaba comprometida con el Príncipe Guillermo de Suecia, hijo del Rey Gustavo V de Suecia y de la Princesa Victoria de Baden. El padre de María al principio se negó a asistir a la boda, que tuvo lugar en Tsarskoye Selo, Rusia, el 03 de mayo de 1908, debido a que el Zar se negó a permitir a su esposa a asistir y porque los niños permanecieron bajo la custodia del Zar y de la Gran Princesa Isabel. De dicho matrimonio nació un único hijo: Lennart, Duque de Småland, y posteriormente Conde Bernadotte y Wisborg. En un principio, el matrimonio parecía feliz. María compró una casa en Suecia y agregó el sueco a los otros cinco idiomas que hablaba. Se hizo muy popular entre los suecos. Sin embargo, el matrimonio finalmente se separó cuando María descubrió que había muchas restricciones en la Corte sueca y que su marido Guillermo, como oficial naval, pasó poco tiempo a su lado. En un viaje de cinco meses a Siam en 1912, como representante sueca de la coronación del Rey de Siam, María tuvo la oportunidad de conocer otros hombres y coquetear con ellos, lo que le gustaba. En otro viaje a Alemania en 1913, María le dijo a su marido que quería el divorcio. Su padre la llevó a casa con él. La pareja se divorció en 1914. María dejó a su hijo con su esposo. Fue criado por su abuela paterna y vio rara vez a su madre en los años posteriores. María regresó a Rusia, donde vivía cerca de su hermano menor Dmitri. Durante la Primera Guerra Mundial, trabajó como enfermera en Pskov. Su relación con su tía mejoró, visitándola regularmente en el convento donde Isabel se había establecido. Cuando se enteró de que Dmitri había participado en el asesinato de Grigori Rasputin, el 17 de diciembre de 1916, se horrorizó. María firmó una carta junto con otros miembros de la familia imperial, pidiendo a Nicolás dar marcha atrás en su decisión de exiliar a Dmitri al frente persa. Pero el Zar se negó. El 19 de septiembre de 1917 en Pavlovsk, Rusia, María se casó con el Príncipe Sergei Mihailovich Putiatin. De dicho matrimonio nació un hijo: Príncipe Román Putiatin. El mismo día en que bautizaron al niño, el 18 de julio de 1918, el medio hermano de María, el Príncipe Vladimir Paley fue asesinado por los bolcheviques en Alapaevsk. El padre de la Gran Princesa fue arrestado por los bolcheviques a fines de julio de 1918 y asesinado el 30 de enero de 1919. María y su marido huyeron del país, dejando su bebé a cargo de los abuelos paternos. Primero escaparon a Rumania, luego a Francia y finalmente a Inglaterra. En 1919 recibió una carta de sus suegros indicando que su hijo había muerto a causa de un problema intestinal. María se reunió con su hermano Dimitri en Londres. Sus primeros años de exilio fueron financiados por las joyas que había enviado de contrabando a Suecia antes de escapar de Rusia. Más tarde abrió un taller de costura y textiles llamado "Kitmir" en París, convirtiéndose en una empresaria exitosa en la industria de la moda parisina. Durante Su exilio escribió sus memorias de su vida en Rusia. En 1923 la pareja se separó, sin embargo la Gran Princesa siguió financiando a su marido y familiares. Durante sus años en el exilio, vivió mayormente en Europa, incluyendo Alemania, Suecia, Francia y en España por invitación de la Reina española. Vivió 12 años en Estados Unidos antes de trasladarse a la Argentina. Vivió en Buenos Aires y, luego de la II Guerra Mundial regresó a Europa. María le confesó a su hijo Lennart, ya adulto, que se había sentido sola toda su vida a causa de su niñez sin raíces ni padres. Pasó gran parte de su vida adulta buscando amor, tratando de llenar los espacios vacíos dentro de ella. La muerte de su hermano Dmitri en 1942, la afectó profundamente, ya que era la única persona que realmente había amado. La Gran Princesa María Pavlovna de Rusia, Princesa de Suecia, murió el 13 de diciembre de 1958 en Cosntanza, Suiza, a la edad de 68 años. Su cuerpo fue sepultado junto a su hermano Dmitri Pavlovich, en la iglesia de Mainau, una propiedad de su hijo Lennart.
viernes, 11 de diciembre de 2009
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