CONSTANTINO II. EL ULTIMO REY DE GRECIA.

Constantino de Schleswig-Holstein-Sonderburg-Glücksburg. Nació el 02 de junio de 1940 en Psichiko, a las afueras de Atenas, Grecia. Era hijo del Rey Pablo I de Grecia y de la Princesa Federica de Hannover. A su nacimiento, Jorge II, hermano de Pablo, era el Rey de Grecia. Cuando tenía un año de edad, los alemanes invadieron en país y la familia real tuvo que exiliarse en Egipto y Sudáfrica. Cuando el Rey Jorge II murió en 1947, su padre se convirtió en el Rey Pablo I de Grecia, y Constantino en el Heredero al trono. Fue un gran deportista, ganando la medalla de oro con el equipo griego de vela, durante los Juegos Olímpicos de Roma 1960. En 1964 se casó con la Princesa Ana María de Dinamarca, hija del Rey Cristian IX de Dinamarca y hermana de la actual Reina Margarita II. En 1964, poco después de la boda, falleció su padre y Constantino accedió al trono con el nombre de Constantino II de Grecia. El joven Rey era visto por una parte considerable de la opinión pública como inexperto y sujeto a la influencia de su madre, quien era de carácter conservador y creía en las prerrogativas de la Monarquía. A comienzos de 1967 un golpe de estado militar depuso al gobierno existente y estableció una junta gubernamental. Constantino, acostumbrado como su padre a tener un papel activo en la política, no parecía muy dispuesto a permanecer como una figura decorativa. En diciembre de ese año el Rey fracasó en su intento de derrocar a la junta y debió exiliarse junto con su familia a Roma, Italia. En noviembre de 1968, el régimen promulgó una nueva Constitución que mantenía la Monarquía en Grecia, pero le quitaba todos sus poderes al Monarca. En 1973, la dictadura militar se había vuelto muy impopular y en mayo hubo un intento de golpe en manos de militares monárquicos. En venganza, la dictadura declaró a Grecia una república, decisión que fue refrendada por un plebiscito. Esto significó el fin de la Monarquía en Grecia, aunque el Rey jamás renunció a sus derechos dinásticos al trono heleno. La primera vez que pisó suelo griego tras su partida fue en 1981, para asistir a los funerales de su madre, la Reina Federica de Grecia, que se llevó a cabo en el cementerio familiar del Palacio de Tatoi. En 1993, Constantino realizó su primer viaje de larga duración a Grecia. El ex-monarca y su familia viajaron a través del país y recibieron muestras de simpatía entre algunos sectores de la población. Pro su popularidad, el gobierno lo expulsó del país, y optó por retirarle en 1994 sus posesiones en el país y la ciudadanía griega. Constantino entonces demandó al gobierno griego ante la Corte Europea de Derechos Humanos. Ganó parcialmente, obteniendo del gobierno la suma de 4 millones de euros, y una suma más pequeña para su hermana Irene. Sin embargo, el gobierno no fue obligado a restituirle sus tierras y decidió negarle el pasaporte y la ciudadanía a menos que se hiciese de un apellido. A principios de la década de 2000, Constantino ha recuperado ciertas propiedades en Grecia y ha comenzado a viajar nuevamente a ese país de manera cada vez más frecuente en compañía de su familia. Utiliza un pasaporte danés con el nombre "Constantino de Grecia". Recientemente ha comprado tierras en la costa, al sur de Atenas, y supuestamente planea establecer ahí su residencia permanente. En la actualidad, Constantino y su familia viven en Londres pero mantiene fuertes lazos y contactos con Grecia. De su matrimonio con la Princesa de Dinamarca nacieron cinco hijos: Alexia, Pablo, Heredero al Trono, Nicolás, Teodora y Felipe.