Maximiliano de Wettin. Príncipe de Sajonia y Duque de Sajonia. Nació el 17 de noviembre de 1870 en Dresden, Sajonia. Séptimo de los ocho hijos del Príncipe Jorge de Sajonia, Furuto Jorge I de Sajonia, y de la Infanta María Ana de Portugal. Entre sus hermanos se encontraba el último Rey de Sajonia, Federico Augusto III y la Princesa María Josefa, madre del último Emperador de Austria-Hungría Carlos I. El 26 de julio de 1896, pese a la oposición inicial de su familia, el Príncipe Maximiliano ingresó a la iglesia católica y siendo ordenado sacerdote. Para ello, renunció a sus derechos al trono de Sajonia y a la pensión real que le correspondía como miembro de la familia real. En enero de 1899 se convirtió en Doctor en Teología en la Universidad de Würzburg. Luego de trabajar como pastor de una iglesia en Nüremberg, el 21 de agosto 1900 el Príncipe aceptó el cargo de profesor de derecho canónico en la Universidad de Friburgo. A finales de 1910 Maximiliano generó un escándalo por la publicación de un artículo en una revista eclesiástica donde proponía la unión de las Iglesias de Oriente y la de Roma. En el mismo sostenía que los seis dogmas deberían suprimirse con el fin de facilitar el retorno de la iglesia oriental a la iglesia católica romana. Como resultado de este artículo visitó al Papa Pio X para explicar su idea, luego de la cual accedió a retirar el artículo y a firmar una declaración reconociendo los errores detallados en el mismo y anunciando que había renovado su adhesión plena e incondicional a las doctrinas de la Iglesia Católica Romana. Durante la Primera Guerra Mundial el Príncipe estuvo en el frente de batalla atendiendo a los soldados heridos, dando la unción de los moribundos y dictando misa. Era admirado por los prisioneros de guerra franceses, ya que los atendía de la mismo manera que a los soldados alemanes. También utilizó la Oficina Internacional en Ginebra para enviar mensajes a las familias de los prisioneros franceses. Tras la derrota del imperio alemán al finalizar la guerra, su hermano, el Rey Federico Augusto III se vio obligado a abdicar y la Monarquía en Sajonia llegó a su fin. El Príncipe Maximiliano, Duque de Sajonia, murió el 12 de enero de 1951 en Friburgo, Suiza.
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