Luis de Borbón. El Justo. Nació el 27 de septiembre de 1601 en Fontainebleau, Francia. Hijo del Rey Enrique IV de Francia y de María de Médicis. El Príncipe creció con sus hermanos y hermanas en el castillo de Saint-Germain-en-Laye, junto con los hijos bastardos de su padre. En 1609 el Delfín partió al Louvre junto a su padre para aprender sobre su futuro cargo como Rey. Recibió una educación superficial, no le interesaba el latín ni las letras, sino más que nada la caza y la música. Era también un buen dibujante y un buen caballero, pero su tartamudez, lo revela tímido y sin confianza en sí mismo. El 14 de mayo de 1610, muere Enrique IV y Luis XIII accede al trono con tan solo nueve años. La Regencia fue otorgada a su madre, María de Médicis. La mayoría de edad del Rey es proclamada en 1614, pero María declara que Luis es demasiado débil de cuerpo y alma para asumir los deberes de su cargo, lo aparta del Consejo y deja que gobiernen sus favoritos, quienes acaparan los cargos más altos e importantes del Reino. A medida que Luis crece, se convierte en una persona taciturna y desconfiada. Al lado de todos sus defectos, Luis tenía los instintos de un Rey digno como su padre. El Rey sufría también de celos por su hermano Gastón, quien había sido nombrado duque de Anjou y de Orleans, y quien fuera el favorito de la Regente. La Regencia de María de Médicis fue catastrófica. El 21 de noviembre de 1615 en Burdeos, Francia, la Regente casa a su hijo con Ana de Habsburgo, Infanta de España. El Rey, que sólo tenía 14 años, no consuma su matrimonio y pasaron cuatro años para que compartiera sus aposentos con la Reina. Es gracias a un golpe que el 24 de abril de 1617 Luis XIII accede al poder, ordenando la muerte del favorito de su madre. Exilia a su madre a Blois con el fin de poder tomar el trono. En 1620, María provoca una guerra civil pero es derrotada, aunque su hijo temeroso de más sublevaciones, acepta su retorno a la Corte de Francia. Luis XIII decide participar activamente en los negocios de Estado. En 1624, María de Médicis logra hacer entrar al cardenal Richelieu en el Consejo del Rey. Los dos hombres comparten una misma concepción de la grandeza de Francia y de las prioridades que se imponen en la política. El programa político de Richelieu consiste en la racionalización del sistema administrativo, la lucha contra la Casa de los Habsburgo en el exterior y la sumisión de los grandes señores feudales. El año 1635 marca un verdadero cambio: Francia declara la guerra abierta a España. En adelante, hasta el final de su Reino, el Rey se compromete en una terrible guerra durante la cual comanda en varias ocasiones personalmente su ejército. Tras algunos años difíciles, el ejército francés logra poco a poco la derrota del ejército español. Luis XIII fue un Rey que se preocupó por el bienestar de su pueblo. Fundó una congregación religiosa en la que se ayudaba a los más pobres. Terminó la construcción del puente Neuf, hizó cavar el canal de Briare y creó la primera oficina de censo de desempleados e inválidos. Permite también el retorno de las escuelas de los Jesuitas de Clermont en París, escuelas que fueron abiertas a los hijos de los burgueses. Bajo su Reino es acuñado el primer Luis de Oro. Francia se extiende considerablemente bajo su Reino. Verán, Navarra, Cataluña, Saboya, Piemonte, Casale Monferrat, Perpiñan y Lorena fueron incorporados a la corona. El Rey subvenciona las expediciones a Canadá y favorece el desarrollo de la Nieva Francia. Su rechazo de las vanidades, hicieron que tuviera una gran desconfianza hacia sus cortesanos y sobre todo de las mujeres, las cuales consideraba frívolas y viciosas. Estas actitudes hizo correr el rumor sobre su posible homosexualidad. La mayor preocupación de Luis XIII durante su reinado fue la gran ausencia de un heredero varón. Con una salud mediocre y sacudida por fuertes enfermedades, el Rey estuvo a punto de morir en varias ocasiones. Estos hechos hizo crecer una gran esperanza en los pretendientes al trono, entre los que se encontraban su hermano, sus medios-hermanos y sus sobrinos. Además la dificultosa relación entre Rey y la Reina hacía que la esperanza de los Príncipes aumentara, esperando que el Rey no tuviera un heredero. En 1638, luego de 23 años de matrimonio, nace Luis XIV, llamado “el niño del milagro”. En 1640 los Reyes tienen un segundo hijo, Felipe, futuro Duque d’Orleans. Tres años más tarde, a la edad de 42 años, el 14 de mayo de 1643 en St-Germain-en-Laye, Francia, muere el Rey Luis XIII de Francia de la enfermedad de Crohn, luego de haber pasado seis semanas con cólicos y vómitos. Su cuerpo fue llevado hasta la basílica de Saint-Denis, sin ninguna ceremonia según los deseos del Rey, que no quería agobiar a su pueblo con un gasto excesivo e inútil.
He creado este blog con la idea de que se conozca la vida de los Reyes y Príncipes del pasado y los que, actualmente, ostentan esos títulos ya sea que estén a la cabeza de un Reino o sean los Herederos al trono de un Reino ya extinto.
viernes, 31 de octubre de 2008
jueves, 30 de octubre de 2008
ALFONSO XII DE ESPAÑA.
Alfonso de Borbón. El Pacificador. Nació el 28 de noviembre de 1857 en Madrid, España. Hijo de la Reina Isabel II de España y de Francisco de Asís. Debido a la supuesta homosexualidad del Rey consorte, muchos sospechan que su verdadero padre podría ser el Capitán Enrique Puig Moltó o el General Francisco Serrano y Domínguez, ambos amantes de su esposa. Entre sus preceptores se encontraban el General Alvarez Osorio y el Arzobispo de Burgos, este último elegido por la Reina Isabel, tras consultar con el Papa Pío IX. En 1868, siendo aún un niño, la Reina es destronada por la Revolución, obligando a la familia real a partir hacia el exilio. La salida a Europa del joven Príncipe supuso una experiencia inestimable al encontrarse con otros sistemas políticos como el francés, el austriaco o el británico. Fue el primer Príncipe de España que se formó en centros educativos y militares extranjeros como un alumno más. Estudió en París, Francia, donde se instaló la familia real. El 29 de septiembre de 1869, la familia se traslada transitoriamente a Ginebra, Suiza, donde además de recibir clases particulares, acude a la academia pública de la ciudad. Como continuación de su educación se elige el la Academia real e imperial Teresiana de Viena, Austria. Por último acude a la Academia militar de Sandhurst en Inglaterra. En este país el futuro Rey conoció de primera mano el constitucionalismo real inglés. De la correspondencia de Alfonso con la Reina durante todas sus estancias en los distintos colegios y academias, se pone de manifiesto la relativa estrechez económica en que se movía la familia real en esos años. El 25 de junio de 1870, su madre, la Reina, abdica sus derechos dinásticos, en un documento firmado en París, en favor de su hijo Alfonso. Mientras tanto, en España se sucedían distintas formas de gobierno: Gobierno Provisional (1868-70), Monarquía Democrática de Amadeo I (1871-73) y la I República (1873-74). Ésta fue liquidada en el mes de enero por un golpe de Estado y se abrió un segundo período de Gobiernos provisionales. El 01 de diciembre de 1874, Alfonso hizo público el Manifiesto de Sandhurst, presentándose a los españoles como un Príncipe católico, español, constitucional, liberal y deseoso de servir a la nación. El 29 de diciembre de 1874 se produjo la restauración de la Monarquía. En aquel momento, el Jefe de Estado era el General Serrano. En enero de 1875 llegó a España y fue proclamado Rey ante las Cortes Españolas. Su reinado consistió principalmente en consolidar la Monarquía y la estabilidad institucional, ganándose el apodo de “El Pacificador”. Se aprobó la nueva Constitución de 1876 y durante ese mismo año finalizó la guerra carlista, dirigida por el pretendiente "Carlos VII". Alfonso XII realizó, en 1883, una visita oficial a Bélgica, Austria, Alemania y Francia. Alemania trató de ocupar las Islas Carolinas, en aquel momento bajo dominio español, provocando un incidente entre ambos países que se saldó a favor de España tras un acuerdo en 1885. Ese mismo año se desató un brote de cólera en Aranjuez. El Monarca, sin contar con la aprobación del gobierno, visitó a los enfermos, gesto que fue apreciado por la población. Poco tiempo después, el 25 de noviembre, Alfonso XII murió de tuberculosis en el Palacio de El Prado, en Madrid. El Rey Alfonso XII se casó dos veces. Primero con su prima, María d’Orleans, Infanta de España, el 23 de enero de 1878 en Madrid, España. La Reina murió de tifus unos meses después. Posteriormente se casó con la Archiduquesa María Cristina de Habsburgo-Lorena, el 29 de noviembre de 1879 en Madrid, España. De dicho matrimonio nacieron tres hijos: María de las Mercedes, María Teresa y Alfonso, su sucesor, que nació luego de la muerte de su padre. Con la actriz Elena Sanz tuvo otros dos hijos: Alfonso y Fernando. Su viuda, la Reina María Cristina fue Regente de España hasta la mayoría de edad de su hijo Alfonso XIII, en 1902.
miércoles, 29 de octubre de 2008
FEDERICO VII DE DINAMARCA.
Federico de Oldenburg. Último Rey de Dinamarca de la rama más vieja de la Casa de Oldenburg y último Rey absolutista. Nació el 06 de octubre de 1808 en Amalienborg, Dinamarca. Hijo del Rey Cristian VIII de Dinamarca y de la Princesa Carlota de Mecklenburgo-Schwerin. Federico tuvo una infancia descuidada tras el divorcio de sus padres. Su juventud fue marcada por escándalos privados y durante muchos años fue ”el niño problematico” de la familia real. Los dos primeros matrimonios del Rey terminaron tanto en escándalo como en divorcio. El 01 de noviembre de 1828, en Copenhague, Dinamarca, se casó con la Princesa Guillermina de Dinamarca. La pareja se separó en 1834 y se divorció en 1837. El 10 de junio de 1841 en Neustrelitz, Alemania, se casó con la Princesa Carolina de Mecklenburo-Strelitz. La pareja se divorció en 1846. El 07 de agosto de 1850 en Frederiksberg, Alemania, se casó morganáticamente con Luisa Rasmussen, una bailarina que ya era su amante. Este matrimonio fue feliz aunque despertara gran indignación social entre la nobleza y la burguesía. La Corte y el pueblo no entendían porque, con tantos matrimonios, el rey no lograba tener descendencia. Muchos especularon con la esterilidad de Federico. También se sospechaba de la sexualidad del Rey, ya que durante su época como Príncipe Heredero se lo había vinculado a una relación homosexual con un amigo suyo. Durante su tercer matrimonio, la relación con su amigo siguió adelante. Como Rey quiso que Schleswig-Holstein fuera un estado independiente mientras los daneses deseaban mantener Jutlandia del sur como parte de Dinamarca. El Rey pronto cedió a las demandas danesas, y aceptó el final de absolutismo, aceptando la Constitución del 01 de junio de 1849. Durante la Primera Guerra de Schleswig contra Alemania en 1848-51 Federico apareció como ”el líder nacional” y fue considerado casi como un héroe de guerra a pesar de no haber tomado nunca parte activa en las luchas. Durante su reinado el Rey en su conjunto se comportó como un Monarca constitucional. Sin embargo no dejó completamente de interferir en la política. En dicho período se llevaron a cabo muchas reformas políticas y económicas, tales como la introducción del libre cambio en 1857. La negativa de Alemania de dejar unir Schleswig a Dinamarca, produjo la Segunda Guerra de Schleswig en 1864. El Rey incondicionalmente apoyó esta acción y justo antes de su muerte repentina estuvo listo para firmar una nueva Constitución especial para Dinamarca y Schleswig. El hecho que Federico VII de Dinamarca haya alcanzado la mediana edad sin producir a un heredero generó un problema delicado.
El Príncipe Cristian de Glücksburg había sido "un nieto" adoptivo de la pareja real de Federico VI y de la Reina María Sofía. Era sobrino nieto de la Reina María Sofía y descendiente de un primo hermano de Federico VI. Fue criado como danés, viviendo en tierras danesas. Aunque no significara nada legalmente, lo hicieron un candidato relativamente bueno desde punto de vista danés. El Príncipe Cristian de Glücksburg fue elegido en 1852 para suceder al Rey Federico VII en Dinamarca. Frederick VII murió el 15 de noviembre de 1863 en Glücksburg, Dinamarca y fue sepultado en la Catedral Roskilde. Cristian subió al trono como Cristian IX.
El Príncipe Cristian de Glücksburg había sido "un nieto" adoptivo de la pareja real de Federico VI y de la Reina María Sofía. Era sobrino nieto de la Reina María Sofía y descendiente de un primo hermano de Federico VI. Fue criado como danés, viviendo en tierras danesas. Aunque no significara nada legalmente, lo hicieron un candidato relativamente bueno desde punto de vista danés. El Príncipe Cristian de Glücksburg fue elegido en 1852 para suceder al Rey Federico VII en Dinamarca. Frederick VII murió el 15 de noviembre de 1863 en Glücksburg, Dinamarca y fue sepultado en la Catedral Roskilde. Cristian subió al trono como Cristian IX.
martes, 28 de octubre de 2008
FERNANDO I DE BULGARIA.
Fernando de Sajonia, Coburgo y Gotha. Nació el 26 de febrero de 1861 en Viena, Austria, como Príncipe de Sajonia, Coburgo y Gotha. Hijo del Príncipe Augusto de Sajonia, Coburgo y Kohary y de Clementina d’Orleans, Princesa de Francia. Fernando creció en el ambiente cosmopolita de la alta nobleza austro-húngara y en sus tierras ancestrales en Eslovaquia y Alemania. Bulgaria sustituyó a su primer Príncipe, Alejandro de Battenberg en 1886, sólo siete años después de subir al trono. Fernando fue proclamado Príncipe Reinante de la autónoma Bulgaria el 07 de julio de 1887. Durante los primeros años de reinado, Bulgaria se alejó de Rusia, su antigua protectora. El Rey era bisexual, situación conocida en todas las cortes de Europa, aunque no por ello se vio impedido de contraer matrimonio. El 20 de abril de 1893, en Lucca, Italia, el Rey Fernando I de Bulgaria contrajo matrimonio con la Princesa María Luisa de Borbón-Parma. De dicho matrimonio nacieron cuatro hijos: Boris, Kyril, Eudoxia y Nadejda. La Reina murió el 31 de enero de 1899 luego de dar a luz a su hija más joven. Fernando no pensó en otro matrimonio hasta que su madre murió en 1907. Para satisfacer las obligaciones dinásticas y proveer a sus hijos de una figura materna, se casó con la Princesa Eleonora de Reuss-Köstritz, el 28 de febrero de 1908 en Osterstein, Alemania. Las vacaciones regulares del Rey a la isla de Capri, lugar predilecto para ricos homosexuales, eran conocidas en toda Europa. Los dignatarios que buscaban el favor de Fernando viajaban a aquel lugar acompañados de hermosos jóvenes que presentaban al Rey. Con la caída del Primer ministro, se restablecieron las relaciones con Rusia, cuya reafirmación se dio en febrero de 1896 con la conversión del Príncipe Heredero Boris del catolicismo romano al cristianismo ortodoxo oriental. Sin embargo, esta acción produjo la enemistad de sus parientes austriacos católicos. Fernando se convirtió en el Zar de Bulgaria tras la declaración de independencia del Imperio de Otomano el 05 de octubre de 1908. La Declaración de Independencia fue aceptada por Turquía y por los otros países europeos. En 1912, Fernando se alió a otros países de los Balcanes para atacar al Imperio Otomano y liberar territorios ocupados. Posteriormente Bulgaria atacó a sus aliados Serbia, Grecia y Rumania y fue derrotada. El Tratado de Bucarest en 1913 dio pequeñas ganancias territoriales a su Reino. Un área diminuta de la tierra costera, le aseguró el acceso al Mar Egeo. El 11 de octubre de 1915, el ejército búlgaro atacó Serbia tras firmar un tratado con Austria-Hungría y Alemania. Fernando quería ganancias territoriales luego de la humillación sufrida en las guerras balcánicas. Al finalizar la Primera Guerra Mundial, en 1918, el ejército búlgaro fue derrotado y el Rey Fernando I de Bulgaria debió abdicar para salvar el trono búlgaro a favor de su hijo mayor que se convirtió en el Zar Boris III, el 3 de octubre de 1918. Bajo el nuevo mando, Bulgaria se rindió a los Aliados y como consecuencia, perdió no sólo lo conquistado durante el conflicto, sino también el territorio que había ganado luego de las guerras balcánicas que le daba salida al mar. Tras su abdicación, Fernando regresó a Coburgo, Alemania. Había logrado salvar la mayor parte de su fortuna y fue capaz de vivir con comodidad. El exiliado Rey no se disgustó de su nueva condición y pasó la mayor parte del tiempo dedicado a las artes, horticultura, viajes e historia natural. Sin embargo, vivió lo suficiente para ver el colapso de todo lo que había logrado como Rey de Bulgaria. Su hijo y sucesor, Boris III, murió en circunstancias misteriosas después de visitar a Hitler en Alemania en 1943. El hijo de Boris III, Simeón II, lo sucedió por poco tiempo, hasta ser depuesto en 1946, terminando así la Monarquía búlgara. El Reino de Bulgaria fue convertido en la República de Bulgaria, donde fue ejecutado su hijo Kyril. El Rey Fernando I de Bulgaria murió el 10 de septiembre de 1948 en Coburgo, Alemania, cuna de la Dinastía de los Sajonia, Coburgo y Gotha. Fue sepultado en la Iglesia Católica de San Agustín.
jueves, 9 de octubre de 2008
AUGUSTA DE SAJONIA. REINA DE PRUSIA Y EMPERATRIZ DE ALEMANIA.
Princesa Augusta de Sajonia-Weimar-Eisenach, Duquesa de Sajonia. Nació el 30 de septiembre de 1881 en Wiemar, Alemania. Segunda hija del Gran Duque Carlos de Sajonia-Weimar-Eisenach y de la Gran Duquesa María Pavlovna de Rusia, hija del Emperador Pablo I de Rusia. La Princesa recibió una educación adecuada para su posición, en parte porque su madre era una de las mejores y más destacadas mujeres de su época. Augusta sólo tenía 15 años en 1826 cuando se encontró por primera vez con el que sería su futuro marido, el Príncipe Guillermo de Prusia. Sin embargo el Príncipe estaba enamorado de una Princesa polaca llamada Elisa, pero la Corte de Prusia no la veía con el suficiente linaje como para ingresar a la Dinastía. Guillermo se vio forzado a buscar una novia más adecuada, y pidió la mano de Augusta de Sajonia. El Príncipe valoraba los atributos de su futura esposa pero no la amaba, sin embargo, Augusta estaba enamorada de su futuro marido y esperaba un matrimonio feliz. El 11 de junio de 1829 en Berlín, Alemania, el Príncipe Guillermo de Prusia se casó con la Princesa Augusta de Sajonia, 14 años menor que él. De dicho matrimonio nacieron dos hijos: Federico, Heredero al trono, y Luisa. Las primeras semanas de matrimonio fueron armoniosas y Augusta fue aceptada favorablemente en la Corte prusiana. Sin embargo, pronto la Princesa comenzó a aburrirse con la sobriedad militar de la Corte y la mayor parte de los actos oficiales y cortesanos (que tal vez habrían podido distraerla) estaban reservados para su cuñada, la Princesa Isabel de Baviera. Luego del segundo alumbramiento, Augusta sufrió dos abortos y comenzó a tener episodios de depresión, debido a que no se sentía amada ya que su esposo tenía amantes y a que sufría debido a la enorme presión en su posición en la Corte prusiana. Augusta estaba muy interesada en la política y compartía una ideología liberal. El Príncipe Guillermo fue considerado responsable del baño de sangre de la revolución de marzo de 1848 en Berlín, y aconsejado por el Rey, se exilió en Londres y su esposa Augusta se retiró a Potsdam con sus dos hijos. En 1849 Guillermo regresó de su exilio y se estableció con su familia en Coblenza. Allí, Augusta finalmente pudo recuperar la vida cortesana a la que había estado acostumbrada desde su infancia en Weimar. Mientras tanto su hijo Federico estudiaba en la cercana ciudad de Bonn y se convirtió en el primer Príncipe prusiano que recibía una educación académica. La tolerancia de Augusta por el catolicismo en Coblenza (y durante toda su vida) fue objeto de burla en Berlín y se consideraba inapropiada para una Princesa prusiana luterana. En 1858 su hijo Federico se casó con la Princesa Victoria, la hija mayor de la Reina Victoria I de Inglaterra. Augusta catalogó este enlace como un triunfo personal ya que consideraba que su nuera, educada en un país moderno como Inglaterra, convertiría a su hijo Federico en un monarca liberal. En 1858 el Príncipe Guillermo se convirtió en Regente, ya que su hermano Federico Guillermo IV ya no era capaz de gobernar tras haber sufrido varios infartos, por lo que Guillermo y Augusta viajaron a la Corte prusiana en Berlín. Su esposo nombró a Otto von Bismarck como el nuevo Primer Ministro de Prusia. La Reina consideraba a Bismarck su principal oponente en la Corte prusiana, y por su parte, el primer ministro despreciaba a la Reina por su influencia sobre su marido. A Augusta le desagradaba especialmente la agresiva política exterior de Bismarck y su responsabilidad en el estallido de la Guerra Austro-Prusiana. Al mismo tiempo comenzó a distanciarse cada vez más del Rey y Bismarck comenzó a hablar en contra de la Reina en el Parlamento. Augusta comenzó a sufrir nuevos episodios maníaco-depresivos, por lo que comenzó a realizar frecuentes viajes a Baden, en busca de una cura. La Reina también comenzó a distanciarse de su nuera Victoria, que comenzaba a simpatizar con la causa prusiana y la política de Bismarck. El carácter de Augusta era religioso y honorable y creía que Victoria “carecía de religión”, y comenzó a ausentarse de los actos oficiales. Sin embargo, comenzó a interesarse en la educación de sus nietos Carlota, Enrique y Guillermo, al que tenía en gran estima. Augusta, que aborrecía la guerra, fundó la Asociación Nacional de Mujeres en 1864, para cuidar de los soldados heridos y enfermos. Varias fundaciones médicas y hospitales que todavía existen hoy, fueron creados a iniciativa de Augusta como la Sociedad Alemana de Cirugía. La Guerra Austro-Prusiana terminó en 1866, pero cuatro años después, en 1870, estalló la Guerra Franco-Prusiana y Augusta continuó responsabilizando a Bismarck de los horrores del conflicto. Sin embargo, tras la guerra entre ambos países, Guillermo se convirtió en Emperador de Alemania, y en consecuencia, Augusta se convirtió en Emperatriz. Augusta enterró sus diferencias con Bismarck en los últimos años de su reinado, pues parecía el único hombre adecuado para apoyar a su amado nieto Guillermo. Pero a Guillermo le desagradaba Bismarck y poco después de heredar el trono alemán le obligó a dimitir. Augusta había sufrido reumatismo durante muchos años y en junio de 1881 sufrió heridas severas debido a una caída que la obligaron a utilizar muletas y silla de ruedas, pero que no evitaron que siguiera realizando sus tareas. Finalmente hizo las paces con su marido en su cumpleaños de 1887, sin embargo él murió un año después. Sólo 99 días después, su hijo Federico, que había sucedido a su padre como Federico III de Alemania, sucumbió a un cáncer de laringe. De todos modos pudo contemplar cómo su amado nieto Guillermo se convertía en Emperador ese mismo año. Murió el 07 de enero de 1890, a los 78 años de edad. Fue sepultada en el mausoleo de Charlottenburg, junto a su marido.
domingo, 5 de octubre de 2008
ANA LEOPOLDOVNA. REGENTE DE RUSIA.
Princesa Anna de Mecklenburgo- Schwerin. Nació el 18 de diciembre de 1718 en Rostock, Alemania. Hija de Carlos Leopoldo, Duque de Mecklenburgo-Schwerin y de la Gran Princesa Catalina Ivanovna de Rusia (hermana de la Emperatriz Anna I Ivanovna de Rusia). El 14 de julio de 1739 en San Petersburgo, Rusia, Anna se casó con Antonio Ulrico, Duque de Brunswick-Wolfenbüttel. De dicho matrimonio nacieron cinco hijos: Iván, Catalina, Isabel, Pedro y Alejandro. El 05 de octubre de 1740 su tía, la Emperatriz Anna Ivanovna, adoptó a su hijo recién nacido Iván y lo proclamó Heredero del trono ruso. Unos días después de esta proclamación la Emperatriz murió, el 28 de octubre de 1740, dejando instrucciones respecto de la sucesión, designando a su favorito Ernesto Biron, Duque de Curlandia, como Regente y a Iván como el Emperador Iván VI de Rusia. Biron, sin embargo, era una persona odiada por el pueblo ruso, y Anna (madre de Iván) tuvo poca dificultad en derrocarlo el 08 de noviembre de 1740. Desde entonces ella se convirtió en Regente de su hijo menor de edad, tomó el título de Gran Princesa de Rusia, se convirtió a la fe ortodoxa y recibió el nombre de Anna Leopoldovna. Su nuevo trabajo fue difícil debido a que ella no conocía al pueblo ruso, su corte y los asuntos de Estado. Rápidamente entró en conflicto con la mayoría de los altos funcionarios. Entre sus actos se recuerda la implementación del salario mínimo y límite de horas de trabajo para los trabajadores, luego de detectar las condiciones inhumanas en las que trabajaban los empleados textiles. También ordenó el establecimiento de instalaciones médicas en cada fábrica de ropa. También presidió una brillante victoria de los ejércitos rusos en la Batalla de Lapeenranta en Finlandia luego de que Suecia había declarado la guerra contra su Gobierno. En diciembre de 1741, la hija de Pedro el Grande, realizó un golpe de Estado contra la Regente y su hijo Emperador, venciéndolos rápidamente. Isabel I Petrovna subió al trono. Se dice que el golpe fue apoyado económicamente por los embajadores de Francia y Suecia, debido a que Anna llevaba a cabo una política comercial favorable a Inglaterra y Austria. El ejército encarceló a la familia imperial en la Fortaleza de Dünamünde cerca de Riga, Letonia, y luego los desterró a Kholmogory a orillas del río Dvina. Anna Leopoldovna finalmente murió en aquel lugar el 18 de marzo de 1746 durante el parto de su quinto hijo. Su hijo Iván VI Antonovich fue asesinado en Shlisselburg el 16 de julio de 1764, mientras su marido Antonio Ulrich murió en Kholmogory el 19 de marzo de 1776. Su restantes cuatros hijos fueron liberados de la prisión en 1780 y se instalaron en Jutlandia, actual Dinamarca.
viernes, 3 de octubre de 2008
ALEJANDRO I DE YUGOSLAVIA.
Alejandro Karageorgevic. Primer Rey de Yugoslavia, llamado también “El Unificador”. Nació el 16 de diciembre de 1888 en Cetinje, Montenegro. Hijo del Rey Pedro I de Serbia y de la Princesa Zorka de Montenegro. Alejandro pasó su infancia en Montenegro, y fue educado en Ginebra. En 1910 casi perdió la vida a causa del tifus, lo que le afectó su estómago para el resto de su vida. Continuó sus estudios en la Academia Militar de San Petersburgo, Rusia. Sin embargo, no pudo concluir su instrucción militar debido a que su hermano mayor fue obligado a renunciar al trono de Serbia porque no era considerado una persona de carácter estable como para reinar. De este modo se convirtió en Heredero al Trono. Durante las Guerras balcánicas en 1912 y 1913, como comandante del Ejército, el Príncipe Heredero Alejandro luchó en varias batallas, saliendo victorioso. El 24 de junio de 1914, el Rey Pedro I de Serbia, traspasó el poder a su hijo, por tanto Alejandro se convirtió en Regente del Reino. Durante ese período el Reino fue sumergido en la Primera Guerra Mundial. El 01 de diciembre de 1918, Alejandro recibió una delegación de proveniente de los Estados de Eslovenia, Croacia y Serbia. En dicha reunión se estableció que el Regente dirigiría el destino de todos esos pueblos. De este modo se creó el Reino de los serbios, croatas y eslovenos. El 16 de agosto de 1921 en Belgrado, murió su padre, el Rey Pedro I, por tanto Alejandro heredó el trono del Reino de los serbios, croatas y eslovenos como Alejandro I. El 08 de junio de 1922 en Belgrado, Serbia, Alejandro se casó con la Princesa María de Rumania. De dicho matrimonio nacieron tres hijos: el Príncipe Heredero Pedro, Tomislav y Andrei. El 06 de enero de 1929, en respuesta a la crisis política provocada por el asesinato de Stjepan Radić, el Rey Alejandro abolió la Constitución, prorrogó el Parlamento e introdujo una dictadura personal. Cambió el nombre del país al Reino de Yugoslavia y reestructuró las divisiones geográficas internas del Reino. En el mismo mes, trató de desterrar por decreto el uso del alfabeto cirílico para promover el uso exclusivo del alfabeto latino en Yugoslavia. En 1931, se decretó una nueva Constitución que transfirió el poder ejecutivo al Rey y determinó las elecciones por sufragio masculino universal. El martes 09 de octubre de 1934, el Rey llegaba a Marsella, Francia, para comenzar una visita de Estado a la Tercera República francesa y reforzar la alianza entre ambos países. Siendo conducido en un coche por las calles junto con el Ministro de Asuntos Exteriores Francés Louis Barthou, un pistolero, Vlado Chernozemski, disparó contra los ocupantes. Fue uno de los primeros asesinatos capturados por una filmación. El asesino, líder de la Organización Revolucionaria macedonia, fue reducido por la policía y golpeado por la muchedumbre. El Rey Alejandro I de Yugoslavia fue sepultado en la Iglesia de San Jorge, que había sido construida por su padre. Como su hijo, Pedro II era todavía menor de edad, el primo del difunto, el Príncipe Pablo, se convirtió en Regente del Reino de Yugoslavia.
miércoles, 1 de octubre de 2008
LA FAMILIA IMPERIAL DE RUSIA REHABILITADA.
UN DIA HISTORICO Y GLORIOSO PARA LA FAMILIA IMPERIAL DE RUSIA. LA DINASTIA DE LOS ROMANOV.
La máxima autoridad de la justicia de la Federación de Rusia ha rehabilitado al último Emperador de Rusia, Nicolás II Alexandrovich, y a su familia, fusilada por los bolcheviques en 1918. De esta manera se cierra una página negra de la historia de Rusia y permite a este país, congraciarse con su tumultuoso pasado.
“El Tribunal reconoció que el Emperador no era un ningún bandido sanguinario. Se ha restablecido el buen nombre de Nicolás II”, señaló Germán Lukiánov, abogado de la Casa Imperial de Rusia. El Presidium del Tribunal Supremo de Rusia dictaminó hoy que Nicolás II, su esposa Alejandra y sus cinco hijos: las Grandes Duquesas Olga, Tatiana, María y Anastasia y el Heredero de la corona, el Tsarevich Alexei, fueron víctimas de la represión política bolchevique.
Desde la caída de la URSS, la máxima representante de la Casa Imperial rusa, la Gran Duquesa María Romanova, nacida en Madrid en 1953 y residente desde entonces en España, había pedido insistentemente la rehabilitación de la familia del Zar. En su opinión, Nicolás II y su familia fueron víctimas de un 'crimen político', ya que los bolcheviques consideraban al Zar 'enemigo de clase'. En cambio, la Justicia rusa se negaba, hasta hoy, a rehabilitar a la Familia Real al considerar que no había base legal para considerarlos víctimas de una campaña de represión política bolchevique. La Fiscalía rusa mantuvo durante los últimos años que el Zar no fue asesinado por violar la ley soviética, sino 'como jefe del Estado Ruso, cargo que ejerció durante 23 años' (1895-1918). Los descendientes de la Dinastía nunca perdieron la esperanza y recurrieron una y otra vez el fallo de la Fiscalía, que insistía en calificar el fusilamiento como 'homicidio premeditado'. La Gran Duquesa María Romanova, que llegó a amenazar con acudir al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo para hacer realidad sus anhelos de 'justicia histórica' siempre negó que pretenda la restitución de las propiedades del Zar. 'Yo siempre busqué la condena del crimen cometido por el estado totalitario para que el terror nunca se repitiera en Rusia. Yo, al igual que mi padre y abuelo, estoy en contra de la restitución', señaló hoy a Interfax. Por otra parte, el abogado de la Gran Duquesa señaló que la rehabilitación del último Zar 'es un pequeño paso para el regreso de la Casa de los Romanov a Rusia', aunque para ello el Kremlin debe reconocer a la Casa Imperial como una 'institución histórica'. En cuanto a las sospechas de que los Romanov pretendan recuperar el trono, la Gran Duquesa insiste en que sólo el pueblo ruso en referéndum puede decidir la reinstauración de la monarquía en Rusia. La Iglesia Ortodoxa Rusa (IOR), adalid de la rehabilitación de Nicolás II, al que canonizaron en 2000 como 'mártir del Comunismo', también se congratuló por la decisión de la Justicia. Pese al tiempo transcurrido y el hecho de que tanto el régimen bolchevique que ordenó su fusilamiento como la Unión Soviética ya han desaparecido, las rencillas causadas por su muerte aún no han restañado. Según los historiadores, Nicolás II, su esposa y sus cinco hijos, entre ellos el príncipe heredero, Alexei, fueron vilmente ejecutados en la madrugada del 16 al 17 de julio de 1918 en un sótano de la casa Ipatiev, en la localidad de Yekaterinburgo (Urales) y sus cuerpos escondidos en un bosque. Los restos del zar, su esposa y tres de sus hijos fueron hallados en 1979, y tras ser identificados, fueron enterrados en la fortaleza de San Pedro y San Pablo en San Petersburgo en 1998. En agosto del pasado año, arqueólogos rusos hallaron también los restos del zarévich Alexéi y la gran princesa María, que están siendo sometidos a pruebas genéticas antes de recibir sepultura junto a su familia. Finalmente se hizo justicia…
La máxima autoridad de la justicia de la Federación de Rusia ha rehabilitado al último Emperador de Rusia, Nicolás II Alexandrovich, y a su familia, fusilada por los bolcheviques en 1918. De esta manera se cierra una página negra de la historia de Rusia y permite a este país, congraciarse con su tumultuoso pasado.
“El Tribunal reconoció que el Emperador no era un ningún bandido sanguinario. Se ha restablecido el buen nombre de Nicolás II”, señaló Germán Lukiánov, abogado de la Casa Imperial de Rusia. El Presidium del Tribunal Supremo de Rusia dictaminó hoy que Nicolás II, su esposa Alejandra y sus cinco hijos: las Grandes Duquesas Olga, Tatiana, María y Anastasia y el Heredero de la corona, el Tsarevich Alexei, fueron víctimas de la represión política bolchevique.
Desde la caída de la URSS, la máxima representante de la Casa Imperial rusa, la Gran Duquesa María Romanova, nacida en Madrid en 1953 y residente desde entonces en España, había pedido insistentemente la rehabilitación de la familia del Zar. En su opinión, Nicolás II y su familia fueron víctimas de un 'crimen político', ya que los bolcheviques consideraban al Zar 'enemigo de clase'. En cambio, la Justicia rusa se negaba, hasta hoy, a rehabilitar a la Familia Real al considerar que no había base legal para considerarlos víctimas de una campaña de represión política bolchevique. La Fiscalía rusa mantuvo durante los últimos años que el Zar no fue asesinado por violar la ley soviética, sino 'como jefe del Estado Ruso, cargo que ejerció durante 23 años' (1895-1918). Los descendientes de la Dinastía nunca perdieron la esperanza y recurrieron una y otra vez el fallo de la Fiscalía, que insistía en calificar el fusilamiento como 'homicidio premeditado'. La Gran Duquesa María Romanova, que llegó a amenazar con acudir al Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo para hacer realidad sus anhelos de 'justicia histórica' siempre negó que pretenda la restitución de las propiedades del Zar. 'Yo siempre busqué la condena del crimen cometido por el estado totalitario para que el terror nunca se repitiera en Rusia. Yo, al igual que mi padre y abuelo, estoy en contra de la restitución', señaló hoy a Interfax. Por otra parte, el abogado de la Gran Duquesa señaló que la rehabilitación del último Zar 'es un pequeño paso para el regreso de la Casa de los Romanov a Rusia', aunque para ello el Kremlin debe reconocer a la Casa Imperial como una 'institución histórica'. En cuanto a las sospechas de que los Romanov pretendan recuperar el trono, la Gran Duquesa insiste en que sólo el pueblo ruso en referéndum puede decidir la reinstauración de la monarquía en Rusia. La Iglesia Ortodoxa Rusa (IOR), adalid de la rehabilitación de Nicolás II, al que canonizaron en 2000 como 'mártir del Comunismo', también se congratuló por la decisión de la Justicia. Pese al tiempo transcurrido y el hecho de que tanto el régimen bolchevique que ordenó su fusilamiento como la Unión Soviética ya han desaparecido, las rencillas causadas por su muerte aún no han restañado. Según los historiadores, Nicolás II, su esposa y sus cinco hijos, entre ellos el príncipe heredero, Alexei, fueron vilmente ejecutados en la madrugada del 16 al 17 de julio de 1918 en un sótano de la casa Ipatiev, en la localidad de Yekaterinburgo (Urales) y sus cuerpos escondidos en un bosque. Los restos del zar, su esposa y tres de sus hijos fueron hallados en 1979, y tras ser identificados, fueron enterrados en la fortaleza de San Pedro y San Pablo en San Petersburgo en 1998. En agosto del pasado año, arqueólogos rusos hallaron también los restos del zarévich Alexéi y la gran princesa María, que están siendo sometidos a pruebas genéticas antes de recibir sepultura junto a su familia. Finalmente se hizo justicia…